Páginas

3.3.08

El Graduado (1967).
La crisis de los 20 y de los 40

'Benjamin, quieres venir aquí un momento, no pienso repetírtelo'. El Graduado nos ha dejado una de las frases más míticas de la historia del cine, en boca de la señora Robinson (Anne Bancroft). No obstante, esta película protagonizada por el genial Dustin Hoffman va más allá de una simple frase para el recuerdo.

Muchos pueden tildar la película de tener un cierto aire comercial, pero si nos ponemos en situación (el film fue rodado en 1967) nos damos cuenta de que supuso una auténtica revolución en su momento. El argumento en sí se sale bastante de lo que era políticamente correcto en la época: un estudiante recién graduado comienza a salir con una compañera. La madre de su novia comenzará a seducirlo para provocar en el joven una serie de variopintas reacciones.

Su director, Mike Nichols, utiliza vanguardistas técnicas de rodaje para dar a conocer la historia. Uno de los ejemplos más evidentes es la escena donde el estudiante sale vestido con un pintoresco traje de buceador, regalo de sus padres, para enseñárselo a los invitados a la fiesta. Posteriormente se sumerge en el agua donde encuentra un momento de paz.

Todos felicitan al joven por su reciente graduación, pero a la vez la película transmite la incomprensión que siente el graduado por parte de todos. Digna mención merece también la boda, al final de la película. Imprescindible.

No hay comentarios: